Para trabajar desde casa se necesita una amplia experiencia. No solo en el campo en que te desenvuelves como freelancer, sino también en la organización personal que posees para establecer el orden de tus prioridades y destacarte en tu trabajo profesionalmente.
El error de muchos freelancer es que no saben qué hacer entre relacionarse con los clientes, negociar los pagos, cumplir a pleno con los proyectos, contactar y contratar a los empleados, redactar documentos, o, sacar la basura, hacer la comida, atender a los niños o pasear a la mascota de la casa. Todo esto se vuelve agobiante y agotador para cualquiera si no tomas en cuenta organizarte mejor. Por eso hoy te daremos algunos consejos para que explotes plenamente tu potencial con la ayuda de un poco de clasificación y orden de prioridades.
Estos simples pasos podrían ahorrarte gran parte de tu tiempo
Lista de prioridades
Sabemos que tienes una lista mental de tus prioridades. Tenerlas en mente puede hacer que cualquiera sea olvidada con facilidad. Lo idea es que realices una lista en papel de todas las actividades que debes cumplir en el día, semana o mes. Siendo lo más explícito y completo posible. Escribe todo lo que requiera de tu tiempo, proyectos en marcha o que no se encuentren activos, pero en los que definitivamente invertirás tiempo. Los detalles están de más en este tipo de listas. Lo importante es plasmar todas las tareas que necesitas realizar y el estado de urgencia con el que debes llevarlas a cabo, es decir, las más urgentes claramente van antes y así sucesivamente.
Nivel de impacto
Ya plasmada la información de las tareas donde identificaste las más importantes y las menos relevantes y están frente a tus ojos, puedes proceder a revisarlas una a una para asegurar que ninguna fue olvidada. Realiza un análisis de la importancia que obtendría realizarlas, el impacto que tendrían diariamente en tu trabajo y por ende en las entregas de los proyectos a los clientes. Las fechas de entrega acordadas con los clientes siempre debes mantenerlas presentes, de esta manera cederás el carácter de urgencia a culminar y dar los toques finales al proyecto que está próximo a la entrega final.
Tiempo ganado
Las tareas vienen en su gran mayoría relacionadas unas a otras. Si una tarea frena tu impulso las que siguen a continuación se mantendrán en una lista de espera. Para agilizar el tiempo y mantener un impulso activo, percátate de las labores que necesitan información o un feedback de otros para lograr concretarlas. Para logarlo focalízate en obtener la información y los recursos necesarios para avanzar. De otra manera tardarás buscándolos y perderás tiempo valioso.
Analiza las prioridades
Las diferentes tareas consumen diferentes periodos de tiempo. Identificar un aproximado de cuánto dura cada una es provechoso. Establecerás así el tiempo que debes dedicar a cada una de las labores. Como todo se trata de establecer prioridades, analiza objetivamente tu agenda. Destaca particularmente las tareas que te convenga cumplir con apuro o simplemente por orden de tiempo. Puedes jugar con las relevantes pero largas o las menores cortas y ajustar tu tiempo y enfoque con ellas.
Actualiza tu lista
Como era de esperarse tu espacio de tiempo y prioridades cambió. Posiblemente te volviste más eficiente y tengas periodos para relajarte un poco más. No por eso la lista debes tirarla al olvido. Por el contrario, actualizar tu lista es esencial ya que siempre se agregan nuevas tareas o se desechan otras. Puedes actualizarla cada tanto tiempo como te resulte más práctico.
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