inteligencia-emocional

La inteligencia emocional hoy en día está reconocida como una de las claves para el éxito en todos los ámbitos. Y el teletrabajo no se escapa a ello. ¿Estas de acuerdo?

Aunque no lo creas, ya sabes mucho de inteligencia emocional

Así que te propongo un ejercicio de inteligencia emocional:

Tómate 5 minutos sin distracciones, esto te traerá múltiples beneficios.

¿Empezamos?

Reflexiona sobre estas preguntas

¿Qué emociones sientes al aplicar a proyectos?

¿Que emoción sentiste cuando te aceptaron tu primer proyecto?

¿Qué emoción sentiste al pensar que no alcanzarías a cumplir con los plazos de entrega?

Hay muchas emociones durante el teletrabajo ¿Cierto?

Ahora sigue reflexionando un poquito más

¿Qué emociones te han dado fuerza para realizar tu trabajo?

¿Cuáles emociones te han frenado?

¿Alguna vez has podido transformar las emociones que te han frenado en las que te dan fuerza?

Si ya has respondido a tus preguntas

¡FELICIDADES! ya has dado el primer paso: 

Reconocer tu emociones.

Nombra tus emociones, calma, alegría, sorpresa, enojo, tristeza, frustración etc.

Las emociones que te frenan pueden parecer negativas y que no aportan nada; por lo tanto, hay que controlarlas o eliminarlas. ¿Piensas asi? En realidad, esto es un mito. ¿Por qué? Porque las emociones son mensajeras de tus necesidades. Son alarmas que te avisan que hay algo que tienes que hacer para cubrir esas necesidades. Es más, la palabra emoción proviene del latín “emotere” significa movimiento hacia algo.

Las necesidades básicas del ser humano son: Amor, Seguridad y Libertad.

Dicho esto, te propongo otro ejercicio:

Inteligencia emocional y necesidades

Recuerda una situación

-Primer teletrabajo

-No cumplir con los plazos

-Aplicar a proyectos

-Otra que sea importante para ti

De las emociones que identificaste ¿A qué necesidad responden?

Por ejemplo:

Cuando no pude cumplir con mi plazo de entrega sentí miedo, frustración y vergüenza.

Estas emociones se relacionan mi necesidad de seguridad porque no quería fallarle a mi cliente o arruinar mi reputación. No sabía cómo se lo iba a comunicar a mi cliente. También por la falta de libertad porque tuve que trabajar hasta tarde y me quedé sin hacer ese plan que tenía pensado. También falta de amor hacia mí por no haberlo hecho correctamente.

Tercer ejercicio de inteligencia emocional: Ponte en marcha

¿Cómo cubro mis necesidades para transformar mis emociones que frenan a las que empujan?Siguiendo con el ejemplo anterior

¿Qué te impidió hacer el trabajo en el plazo adecuado?

-Falta de organización

-Falta de conocimiento sobre cómo se realiza ese trabajo

-Surgió un imprevisto

-etc

Habiendo identificado esto, haz un plan de acción para que no te ocurra otra vez.

¡Listo, necesidad cubierta para la próxima vez! Has pasado del freno al empuje para mejorar. 

Estos pasos de la inteligencia emocional te llevarán al éxito porque; conectando con tu interior; vas a saber qué hacer para mejorar y cómo hacerlo en cada caso. Sin inteligencia emocional; probablemente podrías haberte frenado del todo, no comunicarte con el cliente, perder tiempo y energía lamentándote en vez de tener un plan de acción efectivo.

Por eso, no hay emociones negativas ni positivas, todas son útiles y traen un mensaje para saber que necesitas tienes para ponerte manos a la obra y cubrirlas.

El archifamoso coach Tony Robbins propone un nuevo concepto de las emociones;  a las negativas  las llamó de acción y a las positivas las llamó emociones de poder.

Coméntanos debajo ¿Cómo está trabajando tu corazón? ¿Que nivel de inteligencia emocional tienes?

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